Las faltas deficientes son aquellas que suponen un obstáculo para la conducción y pueden generar situaciones de riesgo. Estas faltas requieren una mayor atención, ya que su repetición o gravedad puede conllevar la no aptitud en el examen práctico. Recuerda que con dos de estas faltas suspenderás el examen práctico.
Algunos ejemplos de faltas deficientes son:
1. Realizar incorporaciones obstaculizando vehículos o a peatones, invadiendo otros carriles (incluso el contrario).
2. Incorporarnos a velocidad inadecuada al tráfico o a las vías pertinentes.
3. Obstaculizar el tráfico recorriendo, marcha atrás, más distancia de la permitida (15 metros) o invadir un cruce de vías para incorporarse a otra vía.
4. No guardar la distancia de separación o seguridad frontal suficiente (recuerda que debes guardar un mínimo de 2 segundos en vías urbanas y un mínimo de 3 segundos en interurbanas). Además, no respetar la distancia lateral correspondiente con objetos, personas, ciclistas o animales.
5. Circular a velocidad anormal, tanto por encima de la velocidad máxima como por debajo de la velocidad mínima exigida en cada vía.
6. Detenciones innecesarias.
7. Rebasar la velocidad máxima de una vía en 20 km/h (a partir de este punto ya pueden multarte ¡cuidado!).
8. No facilitar la incorporación a las vías y ceder el paso a vehículos prioritarios y/o personas en los lugares establecidos para ello es también considerado como falta deficiente.
9. No señalizar o hacer incorrectamente el desplazamiento, obstaculizando a vehículos que ya se encuentran en el carril izquierdo.
10. Adelantamientos: iniciar muy próximos al vehículo que pretendemos adelantar, hacerlo cuando otro ha iniciado la maniobra y no guardar la distancia de seguridad son puntos objeto de falta deficiente en el examen práctico del carnet de conducir.
11. Estas son las faltas deficientes más comunes, que nos llevan a suspender el examen práctico del carnet de conducir y su acumulación nos lleva a no completar el circuito planteado de 25 minutos.
